Gil y Torrico expresan su fe en ritmos nacionales

Gina Gil y Fernando Torrico ganaron reconocimiento en Bolivia como intérpretes de música folclórica; ella se ponía el tipoy para cantarle al oriente y él, vestido con un poncho, acariciaba su charango junto con Los Kjarkas. Con historias similares, ambos, por separado, emigraron a EEUU, pero el destino los reunió a miles de kilómetros de su país y conformaron un hogar. La pareja también combinó su talento, y se lo dedican a Dios en una propuesta musical que desde hoy recorrerá Ecuador y que llegará a Colombia, Brasil, Bolivia, España e Inglaterra.

Los bolivianos viajarán llevando su última producción discográfica que han titulado Volviendo a casa.

“El título del material hace referencia, entre otras cosas, a nuestro retorno a los escenarios del país, después de ocho años de ausencia. Queremos recorrer todos los departamentos en noviembre”, anunció Gina. Las fechas de las presentaciones se darán a conocer en los próximos días.

Aunque la inspiración de sus canciones cambió de rumbo, el dúo mantiene su esencia artística, ya que a través de instrumentos andinos y de ritmos como el taquirari, el tinku y la saya, su grupo, Latidos, se abrió espacio en el país del norte.

“Fue muy difícil entrar a este mercado a competir, porque tiene un elevado costo personal. Yo dejé a mis tres hijos en Bolivia y descuidar la familia pasa factura”, manifiesta Gina, que buscó fortaleza en la Biblia.

La cantante afianzó su fe en abril de 2007, cuando le diagnosticaron IGA nefrótica, una grave enfermedad en los riñones que la mantuvo durante mucho tiempo hospitalizada, incluso la llevó al coma. Sin embargo, logró reponerse y en diciembre presentó el primer disco junto a su esposo, al que denominaron -oportunamente- Despertar.

Latidos

Latidos tiene tres discos editados, todos producidos por Digistar Music, el estudio de la pareja en Virginia.

Se diferencia de otros grupos cristianos porque sus presentaciones son alegres y coloridas, ya que incluyen bailarines que lucen las vestimentas típicas bolivianas.

Sobre futuros lanzamientos, la también pastora de la Comunidad Cristiana Renacer Falls Church confesó que espera componer canciones mientras dure la gira.

El éxito

¿Consiguió el éxito que buscaba?, preguntamos. “Yo quería que todo el mundo me reconociera, pero estaba equivocada. El verdadero éxito está en la familia”, indica la feliz abuela de cuatro pequeños, que sigue vistiendo con orgullo el tipoy que caracteriza a la tierra donde nació