Gutiérrez, enfatiza sus habilidades musicales tocando guitarra, además funge como primera voz y hace más de doce años atrás ejerce como director del grupo. “Nos sentimos preocupados porque estamos siendo desplazados por músicos extranjeros”, declaró.
Según las explicaciones de los miembros del grupo Mayampi, lo que actualmente sucede en las ciudades de El Alto y La Paz y, el resto del país es que la gente contrata con preferencia a grupos y artistas internacionales.
“Pudimos percibir que nuestra propia gente aprecia más lo extranjero y no lo nuestro, cuando debería ser al revés (…) los artistas internacionales amenizan fiestas ocasionando fuga de divisas”, agregó el director de Mayampi.
A juicio del profesor Edwin Copa, encargado del charango y considerado el alma del grupo Mayampi el problema tiene una réplica sociológica porque responde a un “proceso de la herencia colonizadora que lastimosamente el boliviano piensa que lo de afuera es mucho mejor, los fraternos piensan que por traer artistas extranjeros su fiesta va ser la mejor”, desde su punto de vista radica una dominación colonial mental desprestigiando la competitividad del artista boliviano
Mayampi, tiene su radio de acción en El Alto, cuenta con 14 años de vida, durante sus presentaciones cantan canciones en aymara, quechua, huayño peruano, también, interpretan canciones de cumbia, éxitos del ayer y clásicos de los ochenta.
“Detrás de los artistas bolivianos hay familias integras, vivimos de la música para dar de comer a nuestros hijos, deberíamos luchar para que el dinero que generamos con el sudor de nuestra frente se quede en nuestro país y no se vaya a otros países”, explicó Gutiérrez.
Desde su agrupación se comprometieron iniciar una campaña de regulación a partir del gobierno central, la aprobación de una ley que proteja a los artistas bolivianos sería lo más correcto pues muchos de ellos no tienen un salario fijo y carecen de beneficios sociales. Gutiérrez, exhorta que los alteños y paceños apoyen y contraten a los grupos bolivianos,
Por otro lado, Juan Arratia, baterista, se siente ofuscado porque los fraternos contraten artistas foráneos solamente por obtener un imaginario falso, mientras, Eusebio Vargas, oriundo de Cochabamba, encargado de los vientos, afirma que Mayampi produce canciones revolucionarias que se caracterizan con la gente más humilde de El Alto y tranquilamente su repertorio puede superar a cualquier artista extranjero.
Los integrantes de la agrupación se definen como verdaderos alteños con sangre revolucionaria, elogian a la ciudad de El Alto por poseer en sus barrios gente migrante y triunfadora.