Se hizo honor a las composiciones de Matilde Casazola y Jesús Durán, no hay dónde perderse. En el Teatro Municipal se honró a estos grandes con el ensamble Entre Cuerdas, conformado por David Portillo y Teresa Morales en las voces, y Óscar García y Gabriel Guzmán, en las guitarras. Hoy, a las 22.00, se repetirá el recital en Equinoccio (Sánchez Lima 2191).
Fue casi una ofrenda escuchar a Portillo tras un prolongado lapso de ausencia de los escenarios, quien en los últimos dos años sólo apareció en colaboraciones. La espera fue recompensada. Su voz, intacta, conmovió en ese falsete que lo caracteriza. Supo dar el rostro a canciones que requerían dulzura, como la consabida Las Ninfas (No le digas).
Tere Morales tiene una voz enorme, no sólo porque su canto arrasa, sino porque cuenta con un amplísimo registro, atípico en la música popular en Bolivia, el cual se pasea con naturalidad en tonalidades profundas y luego, en agudos de mezzosoprano.
Hay que destacar la sutileza con que Gabo Guzmán impregnó las introducciones de las composiciones de Matilde. Fue también en introducciones donde se pudo apreciar los más exquisitos aportes de García, quien elevó con sonidos disonantes composiciones germinadas en la estructura de cueca tradicional.
Marcela Araúz es periodista. Ver la crítica completa en www.la-razon.com
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