El exvientista del grupo folklórico María Juana Juan Carlos Veizaga, junto con su esposa, desmintió anoche en el programa televisivo No Mentirás que la haya golpeado. Aunque admitió que tuvo una discusión con ella, que había bebido, y que golpeó la puerta de su casa “insistentemente” para ingresar en ella a medianoche.
En el programa, Veizaga le pidió disculpas a Sandra, su pareja, por la discusión y a “todas las mujeres” y manifestó su deseo de retornar al grupo musical, del que dijo que era “su vida”.
La aparición del acusado de golpear a su cónyuge se dio luego de que el miércoles el grupo emitió un comunicado mediante el cual anunció el alejamiento del músico, “para que asuma las consecuencias judiciales por sus actos”. El director de ese grupo, Marco Veizaga, que además es hermano del expulsado, había declarado: “Nosotros nunca vamos a estar de acuerdo con este tipo de violencia”.
En el programa televisivo, la pareja admitió que el sábado pasado protagonizó una discusión, la cual, aseguró, no llegó a los golpes. Su esposa indicó que ese día llegó la policía a su hogar, ubicado en la zona de la fábrica Quimbol en Quillacollo, porque algún vecino llamó al oír los golpes “insistentes” del exintegrante de María Juana en la puerta de su domicilio. Dijo que él había salido “a respirar” y que al retornar zarandeó la puerta de la vivienda.
Según sus palabras, eso fue todo lo que pasó y negaron la versión, difundida por Fides Cochabamba con base en declaraciones policiales, en sentido de que la riña había derivado en una golpiza. Que Juan Carlos la habría lastimado el rostro, hasta hacerle sangrar la boca; y que incluso le habría pisado la cabeza. Ella mostró, en el programa, un certificado de trabajo de la Alcaldía de Vinto que indica que ella fue a trabajar el lunes.
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