Graciela Méndez dejó un legado difícil de igualar

Se ganó el denominativo de Ñusta de Ñustas, al ganar estos títulos en el Festival Nacional de la Canción Boliviana ¡Aquí…canta Bolivia! y en el Festival Feria del Charango de Aiquile en la gestión 2016, es Graciela Méndez Magne, quien al recibir este honor, no simplemente se quedó para recibir el bando, sino, empezó a trabajar el año redondo y fue la principal promotora de estas importantes actividades.

Este sábado 21 de octubre, en la última noche del Festival ¡Aquí…canta Bolivia!, Graciel, como se le conoce artísticamente, subió al escenario después de un año y acompañó en la actuación del grupo Rijchariy, interpretando la composición de Ricardo Campos, "Cholita de ojos azules".

"Me siento muy emocionada, muy feliz, puesto que he cumplido como Ñusta, he realizado actividades, he hecho la mayor promoción que se ha podido del festival, resalto mucho el apoyo de mis papás y también de las autoridades quienes me apoyaron bastante, entonces muy feliz de poder estar noche y participar de esta gala en el Festival de la Canción Boliviana", refirió Graciel al bajar del escenario.

Esa misma noche se eligió a la Ñusta de esta versión del festival, título que recayó en la chuquisaqueña, Andrea Otondo, a quien Graciel le deseó el mejor de los éxitos.

"De todo corazón espero que mi sucesora pueda aprovechar el cargo, asumir de una manera responsable el título que se le impone, que pueda difundir el festival y pueda hacer muchas actividades", enfatizó.

Sobre el denominativo que le dieron de Ñusta de Ñustas, ella se siente honrada y se compromete a continuar trabajando por el bien del folklore de nuestro país.

"Me siento muy feliz, me dicen Ñusta de Ñustas y me siento muy agradecida con todas esas personas que valoran el trabajo que he realizado, que valoran ese amor por el arte que tengo, por nuestras canciones, por nuestros instrumentos, por nuestro charango y aún después de entregar los títulos y bandos a las sucesoras, voy a continuar con mucha más fuerza", remarcó Graciel.

Aún tiene una meta superior, después de conseguir el título de Ñusta de Ñustas, y es convertirse en una embajadora de nuestro folklore, y como ella refiere es un sueño que lo conseguirá con mucho trabajo.

"Debo seguir trabajando por ello, por llevar nuestra música fuera de nuestras fronteras, por hacer que el mundo conozca lo que es Bolivia en su infinita diversidad, en su infinita cultura, lo estoy logrando poco a poco", enfatizó Graciel.