"¿Han visto a los Colorados? Ellos tranquilos podrían tocar el himno, pero la responsabilidad está en nosotros. Tranquilos, una vez más vamos a ensayar para estar tranquilos. ¿Alguna pregunta?”, hablaba quien parecía ser el líder de la banda cuatro horas antes de la llegada de Francisco.
Los Colorados irrumpieron a las 15:35 en la pista del hangar presidencial, con una marcha militar y fusiles al hombro. Poco antes de las 17:00 los músicos con ponchos y ch’ullus subieron a la tarima frente a la cual pasaría el Santo Padre.
"No estábamos nerviosos. Es cierto que los Colorados podían tocar también el himno, pero nos encargaron a nosotros porque querían que el Papa tuviera una impresión de lo que es la música boliviana, algo más nuestro”, dijo un integrante, Alex Condori.
Al final, el conjunto con 48 integrantes hizo vibrar los parlantes
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